Tina Marie

Diario íntimo de una mujer joven ex prostituta

sábado, 12 de abril de 2008

Sabado de Abril

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Gracias a todos por seguir votando en la encuesta. He visto con gusto que hay muchos a los que les ha gustado el audio, aunque sigan siendo minoría, de todos modos son cientos. Seguiré tratando de mejorarlo a la medida de mis posibilidades y conforme vaya aprendiendo. Así empecé con las imágenes, desde cero.
Hablando de imágenes, aquí pongo un detalle de lo que mostraré mañana.


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viernes, 11 de abril de 2008

Ocho y medio: El numero magico

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Ross ya llevaba la inercia del tema. Un tema que evidentemente le estaba gustando: PonchI. Quise interrumpirla para tocar de lleno el tema de los viejitos cuando, volvió a decir algo al respecto. Mencionó que si sacaba de ocho punto cinco hacia arriba, PonchI le había prometido algo especial. Le pregunté qué era eso tan especial y volviendo a bajar el rostro para verse la punta de los zapatos, dijo: “Pues... por el culo...” Cortó su frase al esbozar una ligera sonrisa entre cortada y nerviosa. Si mis ojos estaban ya muy abiertos, ahora quisieron salirse de sus órbitas. No era que me sorprendiera que Ross tuviera sexo anal. Yo ya sabía que lo hacía con cierta frecuencia, o cuando menos que, ya lo había hecho algunas veces. Era, esa actitud, ese tono de voz, nervioso y grave que le estaba dando a la plática. “Y... ¿Luego?” Le pregunté. Con su mirada clavada en el suelo y, las manos asidas fuertemente al asiento de la banca, hizo una pequeña pausa. Levantó ligerísimamente el rostro, me miró de medio lado y casi de reojo me dijo: “Pues ya llevo varios ochos y medios”. Dejó escapar una casi imperceptible sonrisa retrospectiva. “A veces, con un ochenta, ochenta y tres, y la chingada. Con eso basta pero, claro que se lo tengo que pedir”. Esta última frase me la dijo casi guiñándome un ojo.
Mientras ella hablaba, yo la estaba mirando fijamente, no queriendo perder detalle de todo. Al momento de terminar la frase vi por primera vez en ella un asomo de rubor en sus mejillas. Aquella a quien todo se le hacía natural y normal y, nunca se apenaba de nada. La pena no era por hacerlo, ni siquiera por decírmelo, sino porque ella había subido sus calificaciones, más pensando en la recompensa inmediata que en la de ser mejor estudiante o que para realmente aprender.
No pude contenerme y solté la carcajada. Como toda respuesta a mi risa, ella agregó: “Hasta nueves...” Esta frase hizo que mis carcajadas se prolongaran aún más. Y todavía resultaron más sonoras cuando añadió: “Ya me tiene bien desfundillada”. En ese momento hubiera querido estar en una cama para reírme a rienda suelta. No tuve más remedio que agarrarme el estómago que ya me estaba doliendo. Ella siguió con su tono serio y hasta grave y, como siempre, tenía el don de cortarme la risa en seco, cuando mirándome de lleno y con voz mucho más natural me dijo, “deberías de buscarte uno que te desholline a ti”. Casi salto del asiento cuando oí esas palabras. Pensé rápido y le respondí que todo sería a su debido tiempo, que yo no tenía prisa por eso pero, que ya llegaría.
Siguió en su nube llamada PonchI y me dijo que él le había dicho que, cuando una mujer tiene relaciones anales frecuentes con un mismo hombre, su recto, o su ano, o lo que fuera, se amoldaba a la verga de él. Que se convertía en una especie de “funda anatómica” para la verga de su hombre. Agregó que lo había notado porque al hacer el anal con ÁngelU o, con GusG o, con alguno de los tres clientes nuevos que tenía, sentía una ligera incomodidad. “Más apretado de un lado, más flojo del otro”. Mencionó. Y, que con PonchI, se la ensartaba y ajustaba perfectamente, como si fueran hechos a la medida mutuamente. Esto último, en lugar de darme risa, me pareció interesante e informativo. Con el tiempo, fui comprobando paulatinamente que también se aplicaba a la vagina y que tenían razón.
Hicimos una pausa para fumarnos un cigarro. Me sirvió para reflexionar que se preveía un futuro algo complicado para ellos. Una cosa es que quieras a tu pareja y que, por lo mismo, quieras facilitarle dos o tres miembros del sexo opuesto, para que se las coja o, se la cojan, dependiendo del sexo de la persona y otra más compleja es la que ganes dinero de que todos los días te coja una cantidad importante de individuos desconocidos. No quise decir nada en ese momento. Recordé que en aquellos días, nuestra queridísima amiga, “La Oruga”, había tenido o, seguía teniendo, una relación con un hombre maduro. Claro, ella sin el agravante de ser puta. Pero al final, le había resultado una relación enriquecedora y constructiva.
Pensé que Ross ya se había desahogado lo suficiente, hablándome de “su amorcito” y ahora sí aclararía la situación con los viejitos.



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Audio Podcast


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Nota: Aumenté la calidad de audio. espero sus comentarios respecto a la relación aumento de calidad/peso del archivo.


Vota en la encuesta que se encuentra en la columna de la derecha. Te tomará menos de un minuto. Gracias.


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jueves, 10 de abril de 2008

Son novios... Y se cogen... De la mano... Lero, lero.

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Quizá en esa misma ocasión o un poquito después, volvió a salir el tema de los viejitos. En el que Ross me dijo que si quería yo me los quedara porque ella no se daba abasto con los tres clientes que había conocido en la casa de la señora y, con nuestros tres amigos. Algo sorprendida, le pregunté si entonces los veía todos los días. Me respondió que a sus clientes nuevos, los veía de una a dos veces a la semana pero que, como de costumbre, con nuestros tres amigos la frecuencia era bastante mayor. Que incluso, a PonchI lo veía casi a diario. Le respondí con un altisonante, “¡¿Qué?!” y luego agregué: “Que se me hace que esto va muy en serio”. A lo cual, levantando la cabeza y viendo al frente sin fijar su vista en nada, para después bajarla y mirarse las puntas de los zapatos, respondió: “No sé... es raro, no sé como decirte...” Siguió titubeante: “Me siento bien con él, incluso nos hablamos varias veces al día... Le hablo o me llama. Me pregunta si ya hice la tarea...” La escuchaba mientras yo abría mucho los ojos y ella proseguía: “Hasta ha habido veces que me exige que vaya a su casa con mis libros y que estudie allí”. Yo continuaba con la boca abierta mientras ella proseguía: “Me pone a estudiar en la cama, o a hacer la tarea y, hasta no me coge si no la termino y de plano me lo dice. Me pone a que haga la tarea en la cama, mientras él anda en calzoncillos en la casa pero no me distrae. Cuando termino la tarea, se la enseño y me dice que me merezco un premio...” Yo seguía escuchándola y ahora también yo miraba al suelo. Ella continuaba con su relato: Me levanta la falda y yo, para ese entonces, ya me he quitado los calzones, se baja la trusa, ya la trae bien parada y me la ensarta hasta el fondo el pinche cabrón. Me da unas cogidotas memorables, créeme que todavía en la noche me está punzando la panocha... Y, mientras me esta cogiendo de ranita me pregunta: -¿Te gusta tu premio?- y, todavía no le respondo cuando me pregunta: -¿Verdad que valió la pena el estudio?- Y, como puedo, le respondo: Sí papito lindo, sí, gracias.”
A cada palabra que ella decía, yo abría más la boca. No sé porqué pero, me parecía sorprendente. Ahora, en retrospectiva, veo que había una relación, padre-amante con hija-amante. No voy a entrar de lleno en esto porque no conozco el tema. Sólo digo que sí veía una simbiosis muy interesante en esa relación y, que además de todo era muy constructiva para ambos, quizá más para ella. PonchI quería una amante-hija que no fuera burra, ni ignorante. Y ella, pues... quería una hombre que la tratara bonito, que fuera interesante y se la cogiera rico, sabroso... A mi entender, la balanza se inclinaba un poco a favor de mi loca amiga, ella ganaba más.
Mi morbo afloró un poquito y cuando me dijo que, estando ella acostada bocabajo, le mostraba la tarea terminada y como recompensa, ahí mismo se la ensartaba, le pregunté si no le dolía. A lo cual me contestó: “Imagínate. No hay nada más anti-erótico que estudiar. Te levantas para ir a miar, quedas súper limpia y seca, en lo que estudias, no te mojas nada, ni te excitas, terminas y este cabrón te la ensarta hasta que la sientes en la garganta, ¿Cómo no me va a doler? Lo que menos hace que me moje es leer matemáticas o la chingada.” Como siempre me arrancó una carcajada aunque no tuviera ganas. Aunque luego para borrar esa sonrisa de mi boca dijo: “acuérdate de alguna vez que te hayan cogido en seco y luego ríete.” Automáticamente mi sonrisa desapareció de mi boca aunque luego brotó otra carcajada más sonora. Ya traía la inercia.
Antes de que volviera a tocar el tema de un trío o cuarteto donde yo estaría incluida y PonchI sería el único varón, quise aclarar muy bien lo de los viejitos.


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Gracias.



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miércoles, 9 de abril de 2008

Explicacion de Audio Podcast.

Muchas personas han escrito a mi correo o en la encuesta, diciendo que no saben como escuchar el audio del texto. Es muy simple: Sólo hacer click, es decir, dar un click sobre la frase Audio Podcast, al final de cada texto y se abrirá una ventanita. Es muy ligera y no afectará en nada.
Gracias por su interés.

Pd. En caso de persistir sus dudas, con gusto las trataré de aclarar.


Pd. 2 Por favor vota en la encuesta de la derecha, te tomará menos de un minuto.
Muchas gracias.




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martes, 8 de abril de 2008

"Conversaciones..."

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No tengo muy claro en mi memoria el día que hablé con Ross, es decir, como nos pusimos de acuerdo para vernos y en que circunstancias. Lo que sí recuerdo es que me dijo que nuestros tres amigos la habían estado acaparando mucho y que además, por medio de una chica que había conocido en la casa de la señora, había conocido a un trío de clientes con los que estaba haciendo piras frecuentemente. Ya tenía dos grupos para piras, no se daba a basto y estaba teniendo una fuente importante de ingresos, sin tener la necesidad de hacer “espera”, que es de lo más engorroso en ese oficio. Una chica preferiría estar todo el tiempo en la cama, con las piernas abiertas, con un pene hasta el fondo de su vagina y con billetes en una mano. Aquí lo que importa no es tener el pene dentro, sino los billetes en la mano pero, para obtenerlos, hay que tener un pene dentro.
Supongo que al día siguiente, no lo recuerdo con exactitud, coincidimos en la placita y continuamos la conversación. Como ya era costumbre, hablamos de las ventajas y desventajas de todo eso. Estuvimos de acuerdo, en que una situación así era más cómoda y más ventajosa en el corto plazo, mas no en el largo. Si te limitas a un pequeño grupo de clientes, no conocerás más y los que ya tienes, cualquier día los puedes perder.
También, se volvió a tocar el tema de que nuestros tres amigos le insistían mucho en que querían verme y, que además, ya no eran “tres” porque ya le habían presentado a uno más, haciendo que las piras fueran más numerosas y, según ella, “más interesantes”.
Otra cosa que mencionó fue que entre PonchI y ella se había establecido alguna especie de “vinculo”. Que PonchI para ella era especial y, que sentía que había reciprocidad; A lo que le respondí preguntándole entonces porqué ella prácticamente me estaba echando con él, en vez de guardarlo para ella sola. A lo que me resp0ndió con uno de sus geniales, limpios, sanos y bienintencionados razonamientos, desprovistos de morbo y mugre, que muchos otros tenemos: Que él la había conocido a ella siendo para los tres hombres y que poco a poco, ambos se habían estado dando cuenta de que sentían muy bien juntos y por lo mismo, habían a empezado a coger por separado. La interpelé diciéndole que ella cogía separado con los tres, a lo que agregó que era mejor, así ella podía comparar lo que sentía, no sólo sexualmente sino emocionalmente. Añadió que “Si quieres a alguien, tratas de hacerlo sentir mejor. ¿Por qué no darle la oportunidad de que tenga dos o tres culos al mismo tiempo? Incluyendo el mío, claro está”. Dijo.
En ese instante pensé: “¡¿Tres!?”, mas no dije nada, esperé que continuara. Y lo hizo: “No voy a ser menos que nadie si lo dejo que nos coja, al contrario, lo voy a hacer más feliz, eso me hará sentir más feliz a mí y llevaremos mejor la onda. Él no me hace sentir menos por tener sexo con sus propios amigos. ¿Por qué he de hacerlo yo?”. Concluyó.
Entonces sí le pregunté porqué había dicho “tres” si nosotras nada más éramos dos. Me respondió: “Tú sabes que Perla es bien puta, no agraviándonos (risitas). Es mi amiga y la estimo pero, hay que reconocer que es tan puta como nosotras. Ella por dinero sí estaría dispuesta a un cuarteto con PonchI. De todos modos, aunque seamos sólo tú y yo con él”. Callé por un par de segundos mientras pensaba como decirle lo que ya tenía en la mente. Desde ese entonces y hasta la fecha, no sé exactamente porqué, prefiero estar yo sola con un hombre, o con varios, mas no me gusta mucho que haya otra u otras mujeres. Lo puedo hacer y, lo he hecho muchas veces pero, dista mucho de mi ideal. Así se lo dije, agregando que a pesar de lo dicho, si hubiera que hacerlo lo haría, más que todo, por ella, mi amiga, además que de los tres amigos, los tres caballeros, el que me era más agradable era PonchI.



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Pd. Mañana daré una pequeña explicación sobre como escuchar el audio.


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lunes, 7 de abril de 2008

“Punto intermedio...”

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Antes de meterme a la ducha, los viejitos volvieron a besarme los senos por un momento. Después, me pidieron que abriera las piernas. Para no cansarme más de lo que ya estaba, fue poner las plantas de los pies en la superficie del sofá, tal como había recibido inicialmente a V3. Sabía que como no me había lavado, no me harían gran cosa. Esta vez sí acerté. Se limitaron a mirar mi entrepierna y a decir halagos o, a utilizar lenguaje sucio. Más puntos a mi favor. Sí me hicieron algunos ligeros tocamientos pero, nada muy riguroso. Para un hombre “común”, una chica en mi situación, es una especie de “apestada”. No te lo dicen pero, de alguna manera, te lo demuestran.
No me di cuenta hasta que iba en camino a la regadera que, cuando el semen se seca en los pelos, los endurece. Parecían almidonados. Como si les hubieran untado algún pegamento. Afortunadamente, también son muy fáciles de lavar. Se ablanda con el agua y se quita por completo y sin problemas con el jabón.
Antes de abandonar la casa y, en mi supuesta investidura de experta en tríos y piras, les dije que era una tradición despedirse de la chica, abrazándola y besándola con pasión, uno a la vez. De hecho, no conocía casi nada de tríos y piras, cuando menos en lo que respecta a sus tradiciones. Hasta ese momento, sólo había estado con ÁngelU, PonchI y GusG. Pero, estaba decidida a enganchar a ambos viejitos. Estaba convencida de que era mucho dinero para el esfuerzo que me exigían y, que hombres la mitad de su edad, sería la misma cantidad de efectivo y el triple o aún, el cuádruple de esfuerzo y dolor. Así que esos últimos besos y abrazos los di con mucho énfasis y fueron muy bien recibidos.
Ahí mismo, me pidieron el número de algún teléfono celular. Inmediatamente pensé que ya era hora de, o encender el de ÁngelU o comprar otro. Como lo primero ya estaba a la mano. Les di el número del teléfono que me había regalado mi amigo.
Al salir de ahí, sabía que existía el riesgo de que alguno de los tres amigos me llamara, sin embargo, pensé que el tener un celular exclusivo para “mi trabajo”, me liberaría mucho. No tendría que ir a fuerza a la placita y se lo podría dar a algunos clientes especiales, como los viejitos, Solín y Don Farma.
También tenía el pendiente de saber de Ross. Curiosidad más bien. La llamé varias veces durante ese día sin éxito. Al día siguiente, como se estaba haciendo costumbre, cada vez que pasaba un día con situaciones especiales en la placita, en vez de regresar, me fui a la casa de la señora. Ahí, Perla me dijo que había visto a Ross por unos instantes y que aquella había alcanzado a decirle que se encontraba muy ocupada. Fue un día muy activo con la señora pero, rutinario. Con cinco o seis clientes comunes, difíciles de recordar. Así pasaron un par de días más hasta que por fin localicé a mi loquísima amiga...



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domingo, 6 de abril de 2008

Sin Muchos Efectos.

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En esta ocasión, coloco una imagen sin muchos efectos. Me lo estuvieron pidiendo y aquí la pongo. Como siempre, durará hasta la noche del Domingo, -06:00 G.M.T.
Mañana trataré de continuar con la cronología. Esta semana será difícil para mí pero, con mucho gusto subiré todos los posts que me sean posibles.
¡Feliz Domingo a todos!

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Gracias.


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Pd. 2 Mi amiga la oruga, quizá la recuerden, de meses anteriores, vio esta imagen y dice que me parezco al fantasma de la ópera debido a los pixeles en la cara. Jajajajaja. Tiene razón.


Pd. 3 El 25 de Noviembre del 2007 metí este contador al blog. Ya tenía uno, sin embargo, este otro me daba algo diferente: La cantidad de visitas diarias. Por eso lo puse. Hoy, 6 de Abril de 2008, poco después de cuatro meses, llegó a la cifra de cien mil visitas. ¡Muchas gracias!





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Actualización:


Ya la quité.


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